Y cuando escuchaban los acontecimientos conmovedores o cómicos que se representaban en la escena, les parecía que la vida representada era, de modo misterioso, más real que su verdadera vida cotidiana. Y les gustaba contemplar esa otra realidad.
Momo-Michael Ende. Porque libros como estos están hechos para releerlos y guardarlos en un lugar especial del corazón.
domingo, 30 de agosto de 2015
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Abuelito dime tú